Síndrome del impostor y superdotación
¿Obtuviste muchos sobresalientes en tus exámenes y piensas que es porque eran muy fáciles o porque tuviste suerte? Quizás tienes el síndrome del impostor...
¿Qué es el síndrome del impostor?
La persona que tiene el síndrome del impostor tiende a explicar sus éxitos con factores externos como la suerte o la facilidad de la tarea en vez de considerar que si lo consiguió es por sus capacidades. Percibe su imagen exterior de persona brillante como accidental o inmerecida.
Además, vive con la impresión constante de engañar a los demás. Se dice "Dentro de poco van a darse cuenta que no sé nada, que soy incapaz, malo, que me faltan conocimientos, deberían elegir a otra persona. La ilusión no durará mucho tiempo."
Cuando al final tiene éxito y los demás la felicitan, primero la persona con síndrome del impostor está satisfecha de sí-misma, claro, pero en seguida tiene la sensación de que lo que hizo no es gracias a sí misma y no podrá reiterarlo la próxima vez porque la suerte ya no estará.
Busca también la legitimidad que tiene en su trabajo, se siente un fracasado.
A pesar de su denominación "síndrome" y del hecho que ha sido estudiado por muchos psicólogos, el síndrome del impostor no está considerado como patología y no se encuentra entre las condiciones descritas en Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales, el DSM-5.
El síndrome del impostor está claramente relacionado con la falta de autoestima y es muy problemático porque se encuentra frecuentemente en personas que tienen grandes éxitos y el síndrome del impostor les limite en la altura de lo que podrían alcanzar.
Síndrome del impostor y superdotación
Sí un 70% de la población tiene en un momento de su vida el síndrome del impostor, las mujeres y los superdotados lo tendrían más a menudo. En efecto, los superdotados, a menudo perfeccionistas y lúcidos sobre ellos mismos, ven sus fallos y sus errores por lo que tienden en dudar más y tener baja autoestima. Es precisamente lo que yo evocaba en mi reseña del libro del psiquiatra Christophe André.
En cuanto a las mujeres superdotadas con falta de éxito profesional, es todavía más el caso.
En efecto, como lo dice la psicóloga Arielle Adda en su libro sobre el adulto superdotado en el mundo profesional, existe un problema al nivel social. Como para los niños, cuando una mujer guapa se atreve observaciones y preguntas particularmente pertinentes, el auditorio que no se lo esperaba, no entiende nada. Se considera que es imposible. Se piensa que es raro que esta categoría de personas pueda hacer prueba de una mente tan performante. Entonces, si la mayoría de la gente considera que no está debido a sus capacidades sino a una coincidencia puntual, la mujer superdotada tenderá en pensar que es en efecto el caso. (Creo que se podría relacionar eso con la teoría de Asch que se explica en el artículo "¿Superdotado? ¿Y si no eran lo que pensabais?" ).
Estas mujeres superdotadas se fijarán más en sus debilidades que en sus fortalezas, lo que generará un sentimiento de baja autoestima. En consecuencia, adoptarán mecanismos psicológicos como lo es el síndrome del impostor.
No hace falta decir que el síndrome del impostor representa una pérdida de energía que puede provocar algunos trastornos como agotamiento o depresión, sea cual sea la persona.
Estrategias para que la gente no se de cuenta del "fraude"
Las personas que sufren del síndrome del impostor suelen utilizar estrategias para que no se les pongan a descubierto, estrategias que van a reforzar probablemente el sentimiento de usurpación: Un circulo vicioso nace.
Más precisamente, para disimular su "fraude", estas personas aplican una o otra de estas dos estrategias:
- El overdoing: consiste en prepararse para los exámenes de manera muy intensiva o trabajar muchísimo para achacar el éxito a su trabajo excepcional más bien que a sus capacidades, a razones internas.
- El underdoing: consiste en estudiar o trabajar lo menos posible. Esta estrategia permite protegerse en caso de fracaso utilizando la excusa que lo hubieran logrado si hubieran trabajado más (como lo permite también la procrastinación, otra cosa bastante típica de los superdotados).
¿Cómo vencer el síndrome del impostor?
¿Te identificaste? Entonces, ¿cómo vencer el síndrome del impostor?
Primero, se debe tener conciencia que se sufre del síndrome del impostor... Eso puedo ayudar.
Pero si ya contestaste "sí" a la título del capitulo, ¡estás en buen camino!
Luego, debes tener en mente de manera muy clara que ¡nadie es perfecto!
Tienes que aceptar que no es necesario alcanzar la perfección absoluta para merecer el éxito o las felicitaciones que recibes.
Por otra parte, es necesario dejar de creer que son los demás que nos juzgan cuando en realidad somos nosotros que estimamos el resultado insuficiente.
Sin embargo, tampoco se trata de pensar que bajes tu nivel de calidad o tus expectativas sino reajustarlos a la realidad objetiva de lo que realmente y objetivamente requiere tu trabajo con el fin de no entrar en una dinámica de sentirse constantemente inadecuado o insuficiente.
Entonces, ¡empieza a ponerte metas razonables!
Al tener una autoexigencia, lo único que consigues es estresarte más todavía... Al final, lo que cura no es el éxito sino el cambio de mirada que tenemos sobre nosotros mismos. Y si no lo consigues, ¡siempre puedes considerar que "aparentar saber" es una habilidad!
Comentarios:
Écrire commentaire
SILVINA (jeudi, 10 septembre 2015 02:09)
MUY INTERESANTE.
GRACIAS POR DESCRIBIRLO DE MANERA TAN ADECUADA.
Daniel (mercredi, 14 décembre 2016 20:19)
Hola, muchísimas gracias por el artículo, me ha sido muy revelador. Un saludo
Paula (samedi, 24 décembre 2016 19:52)
Casualmente, hace un par de días, hablé de esto con mi psicólogo. Le voy a comentar el artículo. Muchas gracias.